Una buena iluminación de un cuadro o escultura juega un papel fundamental a la hora de contemplar una obra de arte. Es fundamental,  no sólo para la correcta percepción de la obra sino también a nivel de conservación de la misma. Factores como la radiación UV y el calor que genera un foco inadecuado,  pueden ser letales para nuestras colecciones.

Para solucionar estos problemas tenemos que prestar atención a estos parámetros:

  • tipo de luz elegida y cantidad de focos.
  • Colocación respecto a la obra: ángulo de incidencia y distancia.
  • Intensidad de la luz.

Hoy en día es muy fácil la elección gracias a la innovación y desarrollo continuo de la iluminación led. La no emisión de radiaciones UV e infrarrojas velan por la conservación de la obra. La  sostenibilidad, alta gama de posibilidades, alto rendimiento cromático y bajo consumo lo convierten en la iluminación ideal para las obras de arte.

No obstante, nos enfrentamos a dos problemas. Uno, su alto coste, y dos, la instalación de tomas de corriente adecuadas.

Elige siempre un tipo de luz LED, pero fíjate en la temperatura de color y sobre todo en el  “índice de rendimiento cromático” (CRI O ICR) que pone en las características descritas por el fabricante. EL ICR es un sistema internacional para medir la capacidad de una fuente de luz para reproducir los colores de objetos de una manera fiel en comparación a una  fuente de luz natural como la luz del sol. El IRC Se mide en una escala de 0 a 100, cuanto más próximo esté a la centena más parecido a luz del sol y mejor se apreciarán los colores. El cero indica una distorsión total y el 100 ningún cambio de color. Normalmente se consideran malos por debajo de 80 y excelente por encima de 90.

TIPO DE FOCO Y ÁNGULO DE INCIDENCIA:

El tipo de foco ideal. Proyectores bañadores de pared. O focos led. En bombilla desafortunadamente, no hay muchas posibilidades de elección. Las existentes en el mercado son o muy cálidas o muy blancas y poco potentes.

Para el proyector bañador de pared, lo ideal siempre es iluminar desde el techo. El problema es que nos exige la instalación de una toma de luz en el techo. Los proyectores siempre se pueden orientar hacia la obra hasta conseguir el ángulo de incidencia perfecto.

EVITAR EL TIPO DE FOCOS que van superpuestos a la obra, y se han vendido tradicionalmente para iluminar cuadros, pues la fuente de luz se instala demasiado cerca de la obra, con el riesgo que conlleva para la misma, tanto por la acción directa del calor, como por el envejecimiemto de los materiales expuestos a radiaciones UV tan cercanas.

LA INTENSIDAD LUMINICA: